En Bolivia, los conflictos sociales y políticos han alcanzado un punto crítico. Las protestas encabezadas por sectores afines al expresidente Evo Morales han degenerado en hechos de violencia que han dejado heridos, vehículos destruidos, enfrentamientos con la policía y una creciente preocupación por la estabilidad del país.

Ambulancia atacada en Vinto
La madrugada del sábado, una ambulancia de la Caja Nacional de Salud fue atacada, volcada e incendiada por bloqueadores evistas en el puente Khora, municipio de Vinto (Cochabamba). En el vehículo se trasladaban cuatro policías heridos, una doctora, una auxiliar de enfermería y el chofer. Todos fueron agredidos y bajados a la fuerza por la turba, según denunció la ministra de Salud, María Renée Castro.
“Temimos lo peor”, dijo Castro, y anunció una denuncia formal contra los responsables. Los heridos fueron rescatados por una segunda ambulancia y trasladados al Hospital Obrero N°2.

Recrudecen los enfrentamientos en Parotani
Horas más tarde, en el puente Parotani, también en Cochabamba, se registraron fuertes enfrentamientos entre policías y manifestantes. Los evistas intentaron retomar el bloqueo del puente, lo que provocó una respuesta policial con gases lacrimógenos. Al menos dos policías resultaron gravemente heridos por explosivos lanzados desde los cerros.
Siete personas fueron detenidas en el lugar. Portaban cinco armas —una de fuego real—, billetes falsos, granadas de gas pimienta y lacrimógeno, manillas y uniformes de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico. La policía no descarta que el grupo estuviera vinculado al narcotráfico o con fines de desprestigio institucional.

Detención de Enrique Mamani
La jornada escaló aún más con la aprehensión del dirigente evista Enrique Mamani, quien poco antes había amenazado públicamente al presidente Luis Arce. Mamani fue capturado en La Paz y trasladado a la FELCC. El hecho provocó nuevas tensiones en los puntos de bloqueo.

Militares rodeados y policía replegada del Trópico
En Colomi, movilizados interceptaron un camión militar y obligaron a los soldados a mostrar y descargar su equipamiento frente a la multitud. Este acto se suma a una larga lista de acciones que exponen la debilidad del Estado en zonas dominadas por sectores afines al MAS. La policía anunció su repliegue del Trópico por razones de seguridad, lo que ha dejado a esta región sin presencia estatal efectiva.
¿Crisis social o plan golpista?
Mientras el gobierno denuncia un intento de golpe de Estado liderado por Morales para forzar su candidatura, los seguidores del exmandatario afirman que sus movilizaciones responden a la crisis económica y a un rechazo popular contra la administración de Luis Arce. Lo cierto es que Bolivia atraviesa una de las semanas más tensas del último tiempo, con un Estado que parece retroceder frente al caos.