
Santa Cruz de la Sierra. — El sistema de salud de Santa Cruz ha dejado de estar simplemente saturado y ha entrado en fase de colapso, según denunció este miércoles la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública (Fesirmes). La organización sindical convocó a un ampliado departamental para este viernes, en el que definirá posibles medidas de presión —desde movilizaciones hasta un paro— ante la falta de respuestas del municipio.
“Vemos el primer, segundo y tercer nivel totalmente colapsados”, afirmó Ever Patiño, secretario de Conflictos de Fesirmes, durante una conferencia de prensa. El dirigente sostuvo que, tras agotar reuniones, propuestas técnicas y gestiones administrativas, los hospitales continúan cerrando servicios y reduciendo prestaciones por falta de personal especializado y problemas estructurales sin resolver.
Patiño apuntó a la “inacción de los mandos intermedios” de la Alcaldía, responsables —dijo— de frenar o no justificar técnicamente las solicitudes del sector. “Enviamos tres notas al alcalde para acordar un reajuste integral dentro del municipio y no obtuvimos respuesta”, denunció.
A la crisis estructural se suman los brotes de sarampión, influenza y chikunguña que atraviesa el departamento, lo que ha desbordado aún más la capacidad de los centros médicos. Fesirmes remarcó que los recursos actuales no permiten garantizar una atención de calidad y responsabilizó al municipio por la falta de infraestructura, recurso humano y renovación de contratos.
El pasado mes, representantes del Comité Cívico, la Defensoría del Pueblo y el Consejo Social Municipal de Salud (Cosomusa) intentaron coordinar una reunión con el alcalde Jhonny Fernández y el gobernador, pero hasta la fecha no se concretó.
“Si las autoridades no atienden esta emergencia, será la población la que siga pagando las consecuencias”, advirtió Patiño, e instó al municipio a instalar una mesa de diálogo en las próximas horas para evitar que la crisis sanitaria se agrave.